En esta ocasión trataremos de entender cuál es la diferencia entre pyme y startup. Muchas veces se utilizan ambos términos de forma indistinta cuando en realidad no son lo mismo. En Hispanos Emprendedores hablaremos de la diferencia entre estos modelos de negocio.
Pymes: un modelo tradicional
Comencemos por definir qué es una pyme, esta es la abreviación de “pequeña y mediana empresa”. La concepción de las empresas que encajan dentro de este perfil puede variar de un país a otro.
En el caso de Chile se consideran los ingresos por las ventas anuales, que no deben ser mayores a 100.000 unidades de fomento (UF) al año; así mismo se considera el número de trabajadores que debe ser entre 1 y 199.
La Ley 20416 fija las normas para las empresas de menor tamaño. En esta se distinguen tres categorías distintas:
- Microempresas: son las que tienen ingresos por ventas anuales menores a 2.400 UF. Además, tienen entre 1 y 9 trabajadores.
- Pequeñas empresas: sus ingresos anuales por ventas y servicios y otras actividades del giro son superiores a 2.400 UF y menores a 25.000 UF. Tienen entre 10 y 49 trabajadores.
- Medianas empresas: los ingresos anuales por ventas superan las 25.000 UF, pero son menores a 100.000 UF. En cuanto al número de trabajadores tienen entre 50 y 199.
Las pymes tienen una organización más formal que las startups y, al menos en principio, están dirigidas a un mercado local. Esto no quiere decir que no pueden escalar y expandir el mercado, pero este proceso suele ser lento.
Por lo general comienzan como una empresa familiar, como abrir una panadería, y pueden permanecer como tal. Aunque también es posible que en el algún momento superen los parámetros que las definen como pymes.
Las startup buscan la innovación
Explicamos también este concepto para entender mejor en qué se diferencian una pyme y una startup.
Para que una empresa se defina como startup debe cumplir con dos características básicas. En primer lugar, está basado en la tecnología y a través de esta busca impactar un producto o un sector. Por otra parte busca la innovación, que puede ser de un modelo de negocio o un proceso.
Las startups se definen por su escalabilidad; es decir, que tienen la capacidad de crecer muy rápido. Además, apuntan a un mercado global. Este tipo de empresas se orientan al cliente y tienen gran capacidad de cambio, pueden ir adaptando el modelo hasta que encuentran el más adecuado.
Otra característica de las startups es que se denominan de esta forma solo cuando están en su etapa inicial. Una vez que superan esta fase ya no se consideran como tal.
Cuál es la diferencia entre pyme y startup
Ahora que conocemos ambos conceptos podemos detallar las diferencias entre ambos. Una de las principales distinciones está en el mercado al que se dirigen ambas. Mientras que las pymes buscan el mercado local, las startup van más allá y apuntan hacia lo internacional o global.
Con esto las startups trabajan en generar un impacto desde el comienzo, presenta objetivos más ambiciosos que una pyme y puede tardar en encontrar un modelo de negocio que sea rentable. Esta última, en cambio, encuentra un plan de negocios que sea rentable y trabaja en torno a este.
Como vimos antes, el concepto de startup está muy relacionado con el tiempo. Es decir, se considerará como tal una empresa que esté en su primera fase, pero luego deja de serlo. Las pymes seguirán siendo tales mientras cumplan con los parámetros establecidos, sin importar el tiempo.
Las pequeñas y medianas empresas suelen obtener su financiamiento inicial de los ahorros del emprendedor o aportes de familias y amigos. De igual forma optan por créditos bancarios, entre otros tipos de financiamiento.
Pero la principal fuente de financiamiento de las startups son inversionistas ángeles y capitales de riesgo.
En Chile hay opciones de financiamiento para ambos, pero debes saber si tu emprendimiento encaja en el modelo de pyme o startup para acudir al más adecuado.
La escalabilidad y rápido crecimiento son otras características que definen a las startups. Estas apuntan a lo grande desde el comienzo, es un proyecto ambicioso. En cambio, las pymes no nacen con esa intención; pueden tener éxito y crecer con el tiempo, pero en principio se conforman con ser rentables.
Aquí está la diferencia entre pyme y startup. Estas últimas conllevan un riesgo mucho más grande. ¿Puedes determinar en cuál de estos modelos encaja tu idea de negocio?